6:30
estrella
Los ingresos fiscales de Pensilvania bajaron en marzo, mientras que los funcionarios se preparan para un golpe mayor en el futuro por el COVID-19
A la primera señal de tensiones financieras esperadas por el COVID-19, el Departamento de Ingresos de Pensilvania anunció que los ingresos fiscales de marzo fueron un 6.2 por ciento menos de lo proyectado.
El departamento reportó $4.4 mil millones en ingresos, alrededor de $294.6 millones menos de lo previsto.
El secretario de Ingresos Dan Hassell dijo en una declaración que el déficit fue sólo parcialmente relacionado con la pandemia del Coronavirus.
“Esperamos que la pandemia tendrá un mayor impacto en los ingresos en los próximos meses,” dijo Hassell.
Matt Knittel, jefe de la Oficina Independiente del Fiscal — que ofrece un análisis no partidista de políticas del estado, dijo que parte de la bajada era de esperar, debido a los cambios en los pagos de impuestos.
Los esfuerzos de mediación del gobernador Tom Wolf, incluyendo una orden del 19 de Marzo para cerrar miles de empresas, no entró en plena vigencia hasta más de la mitad del mes.
Esa orden, dirigida a todas las empresas que no son “vitales,” puede afectar a dos de cada cinco trabajadores de Pensilvania, según un cálculo realizado por un economista de la Universidad de Pittsburgh.
Pero todavía hubo algunos pequeños impactos en los ingresos del mes pasado. Los ingresos por impuestos sobre la renta y las ventas fueron, respectivamente, $20 millones y $24.2 millones por debajo de los cálculos que refleja el cierre de empresas y los despidos de trabajadores, según el departamento.
El estado ya ha retrasado su fecha límite de impuestos sobre la renta hasta el 15 de julio para que coincida con el Servicio Federal de Impuestos Internos. Eso demoraría hasta $2.1 mil millones en ingresos estatales, según el Departamento de Ingresos.
Los resultados preocuparon a los legisladores, como el presidente del Comité de Asignaciones de la Cámara de Representantes, Stan Saylor, R-York, quien dijo que los números “van a crear problemas” para el estado.
Matt Bradford, del Condado de Montgomery, el Demócrata clasificado en el Comité de Asignaciones, dijo que mientras los hipótesis de ingresos son dramáticamente diferentes, el próximo presupuesto del estado debe priorizar a los trabajadores de primera línea, desde la asistencia médica hasta el comercio minorista y los servicios de emergencia.
“Todavía tendremos que aprobar un presupuesto que financie adecuadamente la educación pública y apoye a las familias trabajadoras, pero en este momento tenemos que hacer lo que sea necesario para ayudar a nuestros trabajadores de primera línea a nivelar la curva, para que nuestros sistemas de atención médica no se vuelvan invadidos,” dijo Bradford.
Sin embargo, hay un poco de esperanza. Los funcionarios todavía están esperando a ver cómo el estímulo federal del COVID-19 recientemente aprobado impacte al estado, y cuales futuros importes aún podrían ser autorizados por el Congreso.
“El paquete de estímulo federal es muy grande y podría compensar una parte significativa del futuro negativo de los ingresos por el virus del COVID-19”, dijo Knittel de la IFO (por sus siglas en inglés= Oficina Independiente Fiscal) en un correo electrónico. “Mucho dependerá de la rapidez con que el dinero federal llegue a los residentes estatales, así como la duración de los cierres de negocios.”
Our stories may be republished online or in print under Creative Commons license CC BY-NC-ND 4.0. We ask that you edit only for style or to shorten, provide proper attribution and link to our web site. Please see our republishing guidelines for use of photos and graphics.